Comen y duermen frente al ordenador desde hace cuatro días. Los más fanáticos de Internet siguen navegando en la Campus Party de Valencia. En ese gran campamento tecnológico se reúnen personas de todas las edades y de todos los rincones del planeta.
David es el campusero más joven. Tiene 12 años. Es la primera vez que se apunta con su padre a la gran fiesta en red. Dice que se lo pasa mejor aquí con los videojuegos, sobre todo los de acción, que en un parque de atracciones.
La acción también le gusta al campusero más veterano. Es Pedro, a sus 71 años este químico todavía en activo es un experto piloto virtual del cazabombardero F-16. Asegura que estar en Valencia le rejuvenece, que es uno más y le parece que tiene la misma edad que los jóvenes.
Quien prueba la Campus Party repite Los hay que no se han perdido ninguna edición. "Mi primer destino es la Campus y después ya me voy de vacaciones a la playa a descansar",dice Iván.
Hoy es el cuarto día de maratón cibernético y ya son demasiadas las horas acumuladas con los ojos pegados a la pantalla. "Los tengo como platos porque en estos cuatro días he dormido un total de ocho","no sé qué hora es. Ayer me iba a comer y era la hora de cenar", "me he tenido que comprar un disco duro porque me he bajado muchas cosas". Se agotan los discos duros y también los campuseros que ya comienzan a dormir debajo de las mesas.
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